POR ARTURO RAMIREZ
Vender un producto, es "sencillo" desde el punto de vista del marketing ya que nos podemos apoyar de la envoltura, al diseñarla en base a colores, tipografías y hasta olores para obtener algo que le resulte atractivo a primera vista al consumidor.
¿Pero que pasa cuando lo que vendemos no son productos, si no servicios?, entonces debemos de crear EXPERIENCIAS que maravillen y cautiven a nuestro consumidor.
Boutiques de marcas como Louis Vuitton, Prada, Armani, Gucci, etc. no solamente tienen el prestigio que han adquirido gracias a la calidad y diseño de su ropa. Entonces, ¿en que consiste el éxito y trascendencia de estas marcas y otras marcas globales?...En que han logrado hacer que entrar a sus tiendas sea un agasajo a los sentidos, desde el layout de los exhibidores, la musica de fondo, el trato (no se diga si ya eres cliente o si compras algún artículo de colección), etc.
La respuesta es fácil de explicar pero representa un reto fascinante y muy díficil de lograr, aún y cuando exista en la marca algún bien tangible como apoyo, ya que no basta con tener platillos deliciosos, un cafe de altísima calidad, o la ropa con el mejor diseño y status, hay que ENVOLVERLO con sensaciones...
totalmente de acuerdo.... el servicio, se vende mejor a través de buenas experiencias que puedan llevarse tus clientes! :)
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